Dos parapentistas sobrevivieron tras chocar en pleno vuelo a 1.450 metros de altura cerca del lago de Aiguebelette, en el departamento francés de Saboya.
Uno de los involucrados en el accidente, Sebastian Watier, de 31 años, registró con su cámara corporal cómo una participante del salto grupal se le acercaba por detrás a gran velocidad antes de impactar contra él.
VIENTOS TÉRMICOS
Tras el choque, ambos cayeron sobre una zona boscosa y quedaron enganchados a los árboles, gracias a lo cual no resultaron heridos, reporta Daily Mail.
Watier quedó inconsciente durante unos 10 minutos, mientras permanecía suspendido de su arnés a 5 metros del suelo.
El aficionado a deportes extremos aseguró que tanto él como su compañera tuvieron la culpa por igual al pasar por alto los vientos térmicos